En este día 10 de julio de 2010, cuando todo el mundo sólo habla de la final del campeonato del mundo,en el que España juega su primera final no puedo sino mirar la cara de una mujer de nombre Sakineh. Sakineh Ashtiani mujer iraní ha sido condenada a muerte, según el código penal de Irán y amparándose en los artículos 98 y 107 de dicho código y acusándola de adulterio, recibirá la muerte a pedradas o lo que es lo mismo, por lapidación.
Alzo mí voz en este blog para pedir el perdón de Sakineh, pido a las autoridades iraníes que reflexionen sobre el valor de una vida humana.Exigo a las autoridades europeas que presionen a las de Irán para paralizar dicha ejecución y que las mujeres en Irán tanto como en otros pueblos del mundo, sean tratadas con la dignidad que se merecen.
A las autoridades de Irán les pediría que buscaran en su código religioso máximo, el Corán la senda del perdón y no de la venganza, pues es bien sabido, que la venganza sólo trae luto y muerte.
Pido a las mujeres musulmanas de todo el mundo, que empiecen a luchar por sus derechos que los tienen como otros seres humanos aunque sean varones. Que es posible casar la religión con la razón y el civismo y lapidar personas por delitos de adulterio choca contra la razón y contra la piedad religiosa.
Quisiera que prácticas tan salvajes como la lapidación desaparecieran para siempre del mundo, como desaparecieron las hogueras de oscura cristiandad de antaño.
Las personas humanas tienen un derecho inviolable, ese derecho es la vida y ni nada ni nadie tiene derecho a quitárselo.
¿Quién podrá lanzar la primera piedra contra Sakineh?,¿quién es tan puro y sin pecados para lanzar esa primera piedra?.¿El juez que la juzgó o el marido que la acusó sin pruebas?.
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